El flúor es un mineral que nos ayuda a mantener dientes y huesos sanos. Es una forma del elemento químico flúor. No podemos producir fluoruro en nuestros cuerpos, por lo que lo obtenemos a través de nuestra dieta. El fluoruro técnicamente no es un nutriente esencial (lo que significa que podemos sobrevivir sin él), pero sigue siendo importante para nuestra salud.
El flúor ayuda a proteger nuestros dientes contra la caries. Lo hace al reducir la desmineralización, que es un proceso por el cual el ácido puede romper el esmalte dental. Específicamente, cuando el flúor se incorpora al esmalte dental, forma fluorapatita, una sustancia cristalina que brinda resistencia contra la desmineralización.1 En otras palabras, el flúor ayuda a prevenir la descomposición del esmalte dental, protegiendo así de la caries.
El flúor también apoya nuestra salud ósea. Esto se debe a que el fluoruro puede estimular los osteoblastos, que son las células que forman hueso nuevo, y puede inhibir los osteoclastos, que son las células que degradan el hueso.2 sup> Por lo tanto, el flúor no solo nos ayuda a formar hueso nuevo, sino que también nos ayuda a mantener huesos fuertes a lo largo del tiempo.
La mayor parte del fluoruro que consumimos proviene del agua. Esto se debe a que a menudo se agrega flúor al agua potable como medida de salud pública (para prevenir la caries dental). El fluoruro también se encuentra en el té negro, ya que estas hojas de té tienen la capacidad de absorber el fluoruro del suelo. Algunos alimentos contienen flúor, pero en pequeñas cantidades. Estos incluyen pescado enlatado, pasas, papas y avena. También podemos obtener flúor de forma tópica, a partir de pastas dentales o enjuagues bucales que contengan flúor.
No hay suficiente evidencia para establecer una recomendación dietética firme (es decir, una Ingesta Dietética Recomendada) para el fluoruro, por lo que en su lugar se utiliza una Ingesta Adecuada (IA). El AI es la cantidad diaria de un nutriente que se supone suficiente para la mayoría de las personas.
La IA para el fluoruro es 0,7-1 miligramos (mg) para niños de 1 a 8 años, 2 mg para niños de 9 a 13 años, 3 mg para adolescentes de 14 a 18 años, 3 mg para mujeres mayores de 19 años y 4 mg para hombres mayores de 19 años.3
No obtener suficiente fluoruro puede aumentar el riesgo de caries y caries. Esto se debe a que cuando el fluoruro no está presente en cantidades adecuadas, la desmineralización (es decir, la descomposición del esmalte dental) puede volverse más probable. La deficiencia de fluoruro también puede afectar negativamente la salud de los huesos, haciendo que los huesos sean más quebradizos y susceptibles a las fracturas. Estas consecuencias se ven en comunidades donde no se agrega flúor al agua potable. Por ejemplo, se ha demostrado que el riesgo de caries dental es significativamente mayor en áreas sin flúor que en áreas con flúor.4
El consumo excesivo de flúor puede ser perjudicial. La toxicidad aguda (a corto plazo) del fluoruro puede causar náuseas y vómitos, así como problemas más graves como convulsiones o arritmia cardíaca. La toxicidad crónica (a largo plazo) del fluoruro, también conocida como fluorosis, puede causar problemas con nuestros huesos y dientes. Por ejemplo, la fluorosis puede hacer que nuestras articulaciones se vuelvan rígidas y dolorosas, y puede aumentar nuestro riesgo de fracturas óseas.4 La fluorosis también puede causar cambios en los dientes, incluidas rayas blancas o manchas marrones.5
Para prevenir la toxicidad, se ha establecido un Nivel máximo de ingesta tolerable (UL) para el fluoruro. El UL para el fluoruro, que representa la cantidad diaria máxima que se considera segura, es 1,3 mg para niños de 1 a 3 años, 2,2 mg para niños de 4 a 8 años , y 10 mg para adultos y niños mayores de 9 años.3
En comparación con todas las demás vitaminas y minerales que obtenemos a través de nuestra dieta, el fluoruro es único en el sentido de que no obtenemos mucho de los alimentos. De hecho, se estima que el 75 % de nuestra ingesta de flúor proviene del agua y bebidas procesadas (por ejemplo, refrescos y jugos de frutas).6
La fluoración (la adición de fluoruro al agua) se considera uno de los mayores logros de salud pública. Específicamente, fue reconocido por los Centros para el Control de Enfermedades como uno de los "Diez grandes logros de salud pública" del siglo XX.7
You can use a dietary supplement of Flúor (F) if you think your diet lacks this nutrient.
Use la lista a continuación para verificar si su dieta tiene suficiente ingesta de Flúor (F).
Esta lista muestra los alimentos que son las principales fuentes de Flúor (F) y la cantidad de Flúor (F) en 100 g de alimento